Cuando llegan los meses de verano, las piscinas se convierten en el mejor aliado posible para combatir las altas temperaturas. Es un espacio que te puede proporcionar diversión y relajación durante esta época del año y, además, supone un valor añadido para tu vivienda. Es por eso que cada vez son más las personas que optan por instalar una piscina en su jardín, patio exterior o chalet.
¿Pero cuál es la mejor opción? Actualmente, existen varios tipos de piscinas con diferentes características. Las principales son las piscinas de obra, las piscinas de poliéster y las piscinas desmontables. Las tres opciones ofrecen grandes ventajas, pero de entre todas ellas, las piscinas de poliéster podrían ser la mejor opción posible.
Esto se debe a tres aspectos principales. Primero, por ser piscinas mucho más económicas que las piscinas de obra, por ejemplo. Segundo, por las características que poseen. Las piscinas de poliéster destacan por su gran firmeza, dureza y resistencia, algo que no pueden ofrecer las piscinas desmontables. Y tercero, su fácil instalación. Si las condiciones son óptimas, una piscina de poliéster se puede instalar en solo unos días. Las piscinas de construcción, sin embargo, requieren de varios días de obra.
Esta última ventaja es una de las más significativas. Si optas por una piscina de poliéster podrás disfrutar de ella en muy poco tiempo. ¿Sabes cómo se instalan este tipo de piscinas? Este es el proceso completo de instalación de una piscina de poliéster.
Preparación del terreno
Antes de comenzar la instalación, es fundamental adecuar el terreno. Esto implica limpiar y nivelar el área donde se colocará la piscina. Es esencial que el suelo no presente irregularidades que puedan dañar la superficie de la piscina.
Excavación
Cuando el terreno esté listo, se procederá a realizar la excavación. Esta debe realizarse conforme a las medidas y dimensiones de la piscina. Para este proceso se utiliza maquinaria especializada y controlada por profesionales.
Colocación de la piscina
Una vez tengamos realizado el agujero, es el momento de colocar la piscina. En el caso de las piscinas de poliéster, al ser de una sola pieza, la colocación es muy sencilla. Una vez que el vaso de la piscina esté encajado en el agujero, hay que comprobar la nivelación y alineación.
Relleno y compactación
El siguiente paso es rellenar con arena y grava el hueco existente entre las paredes de la piscina. El relleno se va agregando de forma gradual mientras la piscina se compacta y nivela. Este proceso es fundamental, ya que evita posibles hundimientos o movimientos no deseados.
Conexiones y acabados
Cuando la piscina esté perfectamente encajada en el agujero, es el momento de instalar las conexiones. Con esto nos referimos a la instalación del sistema de filtración, el sistema de tuberías y cualquier otra instalación eléctrica si fuera necesaria. Es en este último paso también cuando se instalan los acabados finales como la piedra de coronación, las escaleras u otros accesorios opcionales.
Llenado de la piscina
Es el paso final. Llena tu piscina de agua y comprueba que todos los sistemas de conexiones funcionan de forma correcta. Si es así, ya podrás disfrutar de tu piscina.
En Poliéster Espo nos encargamos de todo el proceso de instalación de tu piscina de poliéster. En nuestra web podrás ver nuestra amplia gama de piscinas. Encuentra la que mejor se adapta a tus gustos o necesidades de espacio. Recuerda, también, que puedes solicitar tu presupuesto sin compromiso.
